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| Una gata con sus gatitos (imagen ilustrativa) |
Después
de que una mujer fue consignada por matar a dos gatitas delante de su dueña en
el 2013, se logró una condena de 6 meses de cárcel y una multa de 6 mil pesos.
Elizabeth
Castro, abogada en Derecho Penal y miembro de Abogados Animalistas de Tijuana,
relató que el año pasado se registró el hecho donde la mujer tomó a una gata
cachorra y la estrelló contra el piso, delante de sus adoptantes. Cuando la
madre de la cachorra se acercó a oler el cuerpo, la mujer la tomó entre sus
manos, la metió a una bolsa y la empezó a ahorcar, para después aventarla
contra un muro.
La entidad carece de ley de
protección animal
A
causa de que en Baja California no existe una ley que penalice el maltrato
animal, se buscaron medios, en este caso, la denuncia por "daño en propiedad
ajena intencional".
«En esta tesitura, iniciamos una averiguación previa, el asunto
se consignó al Juzgado Primero Penal; el Juez decidió librar una orden de
aprehensión en contra de la responsable; la señora fue internada en la
Penitenciaría del Estado por un par de días y pagó una fianza para gozar de su
libertad, en lo que duraba el proceso», detalló
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Rueda
de prensa del colectivo defensor animalista
(Imagen de El Sol de
Tijuana)
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El
Juez dio una sentencia absolutoria para la mujer y fue puesta en libertad,
señaló, por lo que el grupo de abogados apeló la decisión ante el Máximo
Tribunal de Justicia en Mexicali, quien revocó la decisión y dictaron sentencia
condenatoria en contra de la responsable.
Agregó que la condena fue de 3 meses
de prisión y una multa de 6 mil pesos, sin embargo, si la responsable no quiere
pasar su condena en la cárcel, podrá pagar 10 mil pesos, más la multa marcada,
lo que hace un total de 16 mil pesos.
Precedente jurídico
Castro
destacó que a pesar de que la pena podría considerarse mínima, el hecho es que
sienta un precedente ante la lucha contra el maltrato animal y leyes que
regulen esta conducta. La gente cada vez está más consciente de lo que significa
maltrato, aseguró, que no sólo consiste en golpes y abusos, sino que va desde
no darle agua y comida a su mascota o no llevarlo a recibir sus vacunas.
«Es un
precedente jurídico que queda para todos nuestros estrados, tanto el Ministerio
Público, como para los jueces, es el primero del que nosotros tenemos
conocimiento», dijo.
Fuente: Frontera.info
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